martes, 22 de noviembre de 2016

Honor

Como no ha dejado de llover desde ayer por la mañana, el río Vero, convenientemente encauzado por una obra civil de hormigón armado y laderas artificiales cubiertas de hierba salvaje frente a mi casa, fluye a toda velocidad hacia ríos más grandes y finalmente el mar.

Sus aguas descienden marrones como cacao con leche. Al otro lado de la orilla hay un grupo grande de árboles y arbustos que crecieron en un solar abandonado. Allí anidan muchísimos pájaros, es algo que pude comprobar desde que a finales de julio nos instalamos aquí. En estos días de lluvia su permanente algarabía ha desaparecido, así como sus constantes salidas y regresos a la espesura vegetal. Los imagino tan quietos en sus nidos como yo en el mío bajo el aguacero. Así de iguales somos. Qué diminuto y palpitante honor.

7 comentarios:

andandos dijo...

Tenemos uno que duerme en el patio, y en verano eran tres aviones. Es verdad que estos días de lluvia se ven menos, como nosotros. Se está bien trabajando en casa mientras fuera llueve, me dijeron ayer.

Un abrazo

Jesús Miramón dijo...

Cuando llueve tan fuertemente como lo hizo entre el lunes y el miércoles pasados, se está bien en cualquier lugar que te resguarde de su inclemencia, y si es tu hogar (siempre pasajero), mejor. Trabajando, leyendo, viendo la televisión, cocinando, escribiendo o simplemente escuchando cómo la lluvia repica en las cosas que hacen ruido allí afuera, donde llueve.

Un abrazo muy fuerte, José Luis.

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(Hoy he tramitado la baja por paternidad de un músico compañero tuyo de trabajo en Lleida, Sergio, y le he dicho que te tenía mucho cariño, lo cual es absolutamente cierto. A ver cuándo podemos concertar una cita para caminar y charlar y tomar unos whiskys o lo que sea menester)

NáN dijo...

Ya me gustaría a mí estar geográficamente cercano y poder unirme a ese "lo que sea menester".

Es muy difícil convencer a los ingenieros de la cosa que esas vías rápidas de agua, rectas y potentísimas cuando llueve mucho, rompen el equilibrio tierra-agua que había existido siempre, afectando gravemente a la flora y a la fauna. No se trata de que el agua llegue lo antes posible a la mar, que es el morir. Con unos pequeños arreglos allí donde un río tiende a desparrarmarse causando graves daños, sería suficiente. Por otra parte no todos los desbordamientos son nocivos. Piensa en El Nilo, que cubría de pronto grandes llanuras, estropenado las cosechas existentes... pero provocando al retirarse que se dieran tres cosechas por cada una que se hubiera estropeado por el desbordamiento.

Lo mismo suele suceder en Murcia y Alicante. He visto a campesinos con la cosecha perdida frotándose las manos por las cosechas rápidas y buenas que iban a tener.

Jesús Miramón dijo...

Querido Nán, qué alegría verte por aquí. El río que atraviesa Barbastro causó muchos problemas en el pasado, y actualmente está domado por el hormigón durante su paso por la ciudad. Antes y después es libre y cuando, como sucedió en las semanas pasadas, venía crecido, el verdadero espectáculo era ir a la cabecera antes de que entrase en la ciudad para contemplar la inundación de riberas y sotos. En ese sentido creo que el Ayuntamiento hizo bien encauzando el río Vero en el tramo que atraviesa la población. Hubo muchas desgracias en el pasado.

En serio, Nán, me alegro tanto de verte por aquí. Un abrazo desde el Somontano de Huesca.

NáN dijo...

Cierto que este verano pasé bastante tiempo en la montaña, donde no tengo Internet (ni siquiera mi móvil viejuno tiene acceso) y que, después, un percance me ha imposibilitado usar el ordenador, sentarme frente a él y usar el teclado, durante mes y medio. Pero fuera de eso, cuando abro el ordenador te leo siempre. Lo que pasa es que lo que te leo me parece tan perfectamente dicho que me parecería una pedantería añadir o comentar algo.

Por supuesto que canalizar un río por las poblaciones es necesario. Para eso, entre otras cosas, existe la maravillosa obra civil.

Que sepas que, siempre que algo externo no me lo impide, siempre estoy. Un abrazo, querido amigo.

andandos dijo...

Me dijo Sergio que lo atendiste muy bien. Yo sé que siempre lo haces así. Ayer lunes estuve en Barbastro por la mañana y pasé por donde trabajas, pero ya me imaginaba que estarías el miércoles. Otra vez será, sin duda.

Un abrazo

Jesús Miramón dijo...

Sí, hice puente el lunes y he trabajado hoy y volveré a trabajar el viernes. Tenemos que vernos. Un abrazo. Y otro para Nán!